Palacio de Orellana

Incomprensible y censurable la campaña que desde los medios de comunicación ‘de la derecha’ se hace a favor de la familia Pérez Herrasti a la cual se la va a expropiar el Palacio de Orellana para ampliar el Archivo de la Represión, o de la Memoria Compartida, o de la Guerra Civil –siempre incompleto- o ‘de Salamanca’.
Así es muy fácil comprender porque durante todos estos años el Gobierno Central y la Junta han consentido el proceso de autodestrucción por abandono del Palacio y cuando alguien, el nuevo Ministerio de Cultura, decide expropiarlo para rehabilitarlo se lanza a la opinión pública las intenciones de la familia por invertir en el Palacio y convertirlo en un Casa-Museo en la que exponer sus propiedades (cuadros, objetos, muebles…). Hasta dos veces ha intentado evitar la familia la expropiación iniciando unas obras que nunca pasaban del vallado del edificio.
En definitiva, la prensa esa, está haciendo ‘el caldo gordo’ a la familia por el simple hecho de minusvalorar la iniciativa del Ministerio, a sabiendas de que la familia no va a invertir nada porque nunca lo ha hecho ni tiene el más mínimo interés. Es, esa campaña, contraria a los intereses de Salamanca.
Expropiación + restauración + rehabilitación + material = ampliación de un incompleto archivo de la guerra, del franquismo, del exilio, de la represión o como usted quiera entenderlo.
Incluso la Junta dice que la recuperación de Orellana es sólo para desviar la atención por el tema de los papeles que Franco robó a los catalanes. Demencial, quieren ver Orellana en el suelo y luego edificar rascacielos, para aprovechar más el suelo.

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