Reclamando el cobro indebido

Como ya explicamos en su día, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León había considerado no procedente la subida del precio del autobús urbano producida en el primer trimestre del, famoso, año 2002. Los ciudadanos de bien, aquellos que guardaron los justificantes, ya pueden pasar a cobrar los importes extras que de forma indebida se aplicaron por aquellas fechas.

473 ciudadanos ya han justificado que se les adeudan 12.345 euros (más de dos millones de pesetas) por lo que la media ronda los 26 euros. La reclamación menor vale 0,46 euros mientras que la mayor asciende hasta los 473 euros. Cifras que confirman el profundo sentido de ciudadanía que reside en esas 473 personas que saben claramente qué está bien y qué está mal. Consideraciones aparte de las cantidades reclamadas, ninguna es exagerada ni irrisoria, todas corresponden ser devueltas.

Aprovechar estas líneas para denunciar el tortuoso proceso por el que han tenido que pasar los reclamantes justificando ante el Ayuntamiento, presentando todo aquello que se les ha exigido y posteriormente, finalmente, presentarse en la oficina de transportes con fotocopia del DNI para cobrar aquello que se les debe. Excusas, trámites, mareos, colas, burocracia, formularios, fotocopias… todo para que te devuelvan lo que te cobraron de más. Cuanta chapuza y paseillo, a posta, ideado a conciencia para lograr que alguien abandone y perdone.

El trasfondo de todo queda en el año 2002 cuando desde todos los sectores se avisó que no se podía subir el precio del autobús sin el consentimiento del regulador regional, que se produjo meses después, mientras desde el equipo de Gobierno, el mismo que sigue gobernando, se enrocaban en que no, que a ellos no les podía pasar, que lo que ellos digan va a… lo de siempre, la prepotencia, la chulería y el autoritarismo de siempre y que les tiene de juzgado en juzgado y Salamanca hecha una mierda y los salmantinos de súbditos de Lanzarote.

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