Escena familiar

Se conserva como una tradición pese a que cada vez surgen más voces críticas con el absurdo cambio horario que al día de hoy le roba 3.600 segundos ¡de sueño!. Entre otros motivos, porque el día dura lo mismo y la noche también, se mantiene por la escena familiar del cambio de hora, todos mirando el móvil, el vídeo, el reloj de muñeca, el de pared, todos cambiando los suyos y los comunes. Sólo el ordenador, el teletexto y los informativos de la radio son suficientemente inteligentes como para no depender de intervención directa.

En el Cerro de San Vicente (extraña exclusiva de Tribuna de Salamanca de la cual nadie se había enterado antes, alguien tiene que ser el primero) se confirma lo que ya se suponía: bajo las pistas de tenis del Colegio Mayor habría restos de un poblado de hace 2.600 años. Los arqueólogos ya han mostrado las viviendas de los vacceos, primeros habitantes de Salamanca, en un proceso enmarcado dentro de la tercera fase del Museo de la Ciudad.

• se han sacado a la luz cinco cabañas de adobe en buen estado de conservación.
• las cabañas, poseen formas circulares en su mayoría, aunque también se ha descubierto una con paredes más rectas.
• el Cerro se configuró como castro celtíbero de la II Edad de Hierro, caracterizado por viviendas circulares de adobe, principalmente.
• se ha instalado durante esta semana una estructura de metal sobre los restos arqueológicos para protegerlos de las lluvias y el viento, tarea para la que fue necesaria una gran grúa en los últimos días.

Julián vuelve a las andadas, y calcula que del Archivo ubicado en el Colegio de San Ambrosio saldrán hasta 6.000 cajas más –según Tribuna- o 12.000 contenedores –según la Gaceta- y supondrán el “desmantelamiento definitivo del centro documental”. Entonces, lo de antes, que también era el “desmantelamiento definitivo”, se vuelve a poner de actualidad. Primero porque interesa que el Archivo sea actualidad y en segundo lugar, se utiliza esa fórmula porque ya antes se pasaron tanto que usaron las palabras máximas, las más exageradas. ¿qué queda ahora?.

Decirlas más veces y más alto. Vuelve el fantasma del Archivo. Menos mal que sobre la defensa jurídica del centro, Julián desvela que “más ya no se puede hacer”.

Ahora sólo queda que el señor director del Centro sea puesto “de patitas en la calle” ya que es un funcionario público que no está siendo fiel a las órdenes de sus superiores (que ya serán ellos responsables de lo que sea) al declarar qué documentos salen, al filtrar informaciones a la prensa, al detestar el Centro de la Memoria… no es propio que sobre esta persona recaiga la responsabilidad del nuevo Centro Documental. Por eso, cuanto antes, antes del otoño, tiene que ser puesto en un lugar en el que sirva a sus intereses particulares. (comienzo como acabé) tic, tac, tic, tac,… ya queda menos para que le cesen.

sindicación

enlace a este post

enviar a un amigo