Existe en el Ayuntamiento una Comisión Municipal, que preside don Julián, la de Callejero. Ahí se dan cita personas que en cierta manera conocen bien la ciudad, su historia, sus calles, y ellos son los que muy de vez en cuando se reúnen para aprobar nombres para nuevas calles en las ampliaciones que se realizan casi lindando el término municipal. De ve en cuando tocan las narices con propuestas sorprendentes como puede ser despreciar a Mateo Hernández para ensalzar a Wences Moreno.
Últimamente don Julián ha propuesto que la conocida como 'Plaza del Depósito', entre la Avenida de Campoamor y la calle Chile del barrio de Prosperidad, se llame 'plaza de la capitalidad'. Lo de don Julián está claro que no es la originalidad, ni el talante reconciliador ni nada por el estilo. Éste alcalde es provocador por naturaleza y sobre todo no sabe casar nada, en este caso lugares y nombres.
También, últimamente, "el mismísimo" ha propuesto que la Avenida de Federico Anaya se llame María Auxiliadora, como si fuese una prolongación. Otra vez intentando omitir o pisotear la memoria histórica o la configuración urbanística de la ciudad. María Auxiliadora llegaba hasta la vía del tren, o lo que es lo mismo, hasta la iglesia. De la vía del tren a Portugal hacia la carretera de Valladolid se llamó Federico Anaya, y bien que queda. Con las "ideas" de don Julián, Federico Anaya se iría al trastero y María Auxiliadora volvería a subir a los altares. Otra vez más, no hay ojos para la Iglesia y para convertirme en un paraíso de curas, vírgenes y devotos. Ni se comprende, ni se comparte.
0 comentarios
Publicar un comentario
<< Portada